Blogia
El ultimo hogar

Ioshua. "Conciencia"

Ioshua. "Conciencia" Me enciendo un cigarrillo; no fumo, pero joder... necesito hacer algo con mis nervios. Estoy delante de la puerta de mi coche pensando seriemente en tomar un autobus para ir al curro. No me apetece comprobar si lo de la noche anterior fue solo un sueño... o realidad.
Camino a la parada del autobus. Allí, una anciana con tres bolsas repletas con compras ocupan todos los asientos. Mierda...
Coloco la espalda contra el cristal de la parada, y me dedico a mirar la calle. Vacía. Es extraño.
Miro el reloj... hora punta.
Suponiendolo casualidad, aguardo al autobus que veo se acerca despacio desde la avenida. Para, y permito que la anciana suba primero. Huele mal, probablemente se haya meado hace rato.
Al entrar en al autobus, me siento extraño. No va muy lleno, apenas algunas personas. Un par de chicas con uniforme de colegio, la anciana, un tipo joven vestido con mono de mecánico, un par de señoras con demasiada laca, un conductor con poco pelo y demasiado huraño. Me miran al subir.
Parecen observarme mientras llego al asiento mas alejado de ellos y me siento. Sus miradas me incomodan; son frías, llenas de odio.
Abro mi bolsa y saco el walkman. Música... eso me relajará. Sintonizo una emisora de radio. Vaya!... han reversionado a Depeche Mode...
Cierro los ojos, y trato de respirar y relajarme. Pero la sensacion dura. Me observan.
Abro los ojos, y veo que la mirada de una de las colegialas, de no mas de 15 años, está fija en mí. Es desafiante. Sonríe maliciosamente. Incluso el conductor utiliza el espejo retrovisor para mirarme. Esto no me gusta. Sólo la anciana parece dormitar e ignorar lo que ocurre.
Me pongo a mirar por la ventanilla. Nadie en las calles...
Esto es muy raro. Durante unos diez minutos, el tiempo parece parado en el autobus.
Veo como la anciana se acerca a la salida y pulsa el botón de parada.
Me pongo depìé. Creo que me bajaré con ella.
El autobus para, y mientras bajo, todos me siguen con la mirada, desafiantes, llenos de rencor. La anciana termina de bajar los peldaños y cuando voy a bajar, el autobus acelera bruscamente, comenzando a cerrar sus puertas.
"¿Pero que...?"
Salto a tiempo de salir del autobus, y veo como se pierde calle arriba. No puedo creer lo que ha ocurrido.
Me levanto y la anciana está mirandome sonriendo.
"Deberías tener cuidado hijo.. en esta línea los conductores no tienen miramientos"
Se da la vuelta y comienza a caminar calle arriba.
La miro alejarse, y me percato de que la calle rebosa vida. Coches, gente...
No consigo explicarme que ha pasado ahí dentro.
Miro el reloj, y asustado corro, llego tarde al trabajo. En apenas unos segundos, adelanto a la anciana y sus bolsas, tratando de llegar a tiempo.
La anciana parece no mirarme... pero entonces lo oigo.
"Corre cuento puedas Ioshua..."
" Te han encontrado, van a por tí."
Me doy la vuelta sobresaltado.
"¿Que ha dicho?"
La anciana me mira.
"Dije que tuviese cuidado con los autobuses de esta linea porque..."
"¡No!¡eso no!,lo otro, lo que acaba de decirme ahora señora."
Turbada, la anciana se rasca la cabeza, y su mirada parece nublada.
"Perdona hijo... a veces digo cosas hablando para mi misma... solo balbuceaba. Disculpeme si creyo que le decía algo."
La miro confuso también yo.
La anciana, sonriendo de nuevo, retoma su camino calle arriba, y yo, despacio, cruzo la calle, pensativo, intentando aclararme las ideas, y mirando a la anciana perderse al doblar la esquina.
Entonces lo oigo.
SKREEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE!
Giro la cabeza y tengo el tiempo justo para ver un coche gris echarse encima mio. No puedo reaccionar.
"¡NO!"
Ordeno a mis piernas apartarse... pero es tarde.
BLUM!
Todo queda oscuro.

1 comentario

Harmu -

He vuelto, y ademas con ganas de saber que pasa despues del BLUM!